La pared torácica está formada por
todas las estructuras anatómicas que rodean los pulmones y pleura, incluyendo
los músculos intercostales, costillas y diafragma.
Cuando la pared torácica está relajada
(y solo cuando está relajada), se comporta como un contenedor elástico, similar
al pulmón. La diferencia de presión a través de la pared torácica, Pw (presión
pleural menos presión a la superficie corporal), determina su tamaño. En
ausencia de cualquier diferencia de presión (Ppl=0 y Pw=0), la pared torácica
volverá a su volumen de reposo, el cual es aproximadamente el 75% de la
Capacidad Pulmonar Total. Cuando la presión pleural está por debajo de la
atmosférica (Pw negativa), la pared torácica es impulsada hacia dentro.
Cuando la presión pleural sube por
encima de la presión atmosférica (la Pw es positiva), la pared torácica se
abomba hacia afuera. De nuevo, es importante comprender que estas condiciones
solo se mantienen cuando los músculos de la pared torácica están relajados (durante
la espiración tranquila, ciertos estados de parálisis o anestesia, y cuando los
músculos respiratorios son concientemente relajados). La diferencia de presión
a través de la pared torácica no tendrá ninguna relación con su tamaño si los
músculos respiratorios están siendo utilizados ya sea para mover el tórax o
para mantener en él un volumen en particular.
En ciertos estados patológicos la pared
torácica puede volverse rígida. En tales casos, puede producirse un defecto
ventilatorio restrictivo.
MUSCULATURA DEL TÓRAX
SISTEMA OSEO DEL TÓRAX
PARTES BLANDAS
Usualmente su situación
externa al tórax es evidente, pero en ocasiones los pezones y tumores cutáneos
pueden simular nódulos intratorácicos y los pliegues cutáneos pueden dar falsas
imágenes lineales. Las mamas voluminosas pueden producir un volamiento tenue, y
una mastectomía, una falsa imagen de hipertranslucencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario